Eurostar, sociedad participada mayoritariamente por SNCF Voyageurs y participada por la empresa belga SNCB, la Caisse des dépôt et position du Québec y el fondo de inversión Federated Hermes Infrastructure, logró una facturación monumental de 2.000 millones de euros en 2023. Este resultado excepcional ha allanó el camino para los ambiciosos planes de Eurostar de adquirir hasta 50 nuevos trenes para 2030, un testimonio de su sólida salud financiera y previsión estratégica.
La filial SNCF Voyageurs también anunció que había reducido su deuda neta en un tercio, hasta 650 millones de euros, gracias a una «fuerte generación de caja tras su recuperación post-Covid» y a «un nuevo préstamo verde a plazo de 650 millones de euros a cinco años». «
30 millones de pasajeros anualmente para 2030
Eurostar transportó 18,6 millones de pasajeros en 2023, lo que supone un aumento del 22% respecto al año anterior. Las rutas que experimentaron el mayor crecimiento fueron entre Ámsterdam y Londres (+38%), Bruselas y Londres (+33%), y París y Londres (+25%).
En un comunicado de prensa, la compañía ferroviaria afirmó que había logrado sólidos resultados financieros en 2023 y había refinanciado con éxito su deuda. Por ello, Eurostar tiene intención de invertir en la compra de hasta 50 nuevos trenes. Todos los pedidos aún no se han realizado. Eurostar, que opera conexiones ferroviarias entre cinco países (Francia, Gran Bretaña, Bélgica, Países Bajos y Alemania), planea adquirir estos nuevos trenes para satisfacer la creciente demanda de viajes y pretende recibir a 30 millones de pasajeros anuales de aquí a 2030.
16 trenes más en la flota del Eurostar
La gestión estratégica de la flota de Eurostar es un factor clave de su éxito. La compañía planea adquirir nuevos trenes que satisfagan la creciente demanda de viajes y reemplacen los más antiguos que serán desechados debido a su antigüedad. Este enfoque eficiente aumentará la flota de Eurostar a 67 trenes, frente a los 51 actuales.y tener los primeros trenes nuevos en servicio a principios de la década de 2030, lo que demuestra el compromiso de Eurostar de mantener una flota moderna y eficiente.
Desde 1994, Eurostar opera TGV entre Londres y el continente europeo a través del Eurotúnel. El otoño pasado, Eurostar se hizo cargo de la marca Thalys, que operaba conexiones entre París, el Benelux y el noroeste de Alemania desde 1995. El pedido de trenes más reciente de la compañía fue en 2014, cuando compró siete trenes a Siemens.




