Accidentes como los atragantamientos ocurren con más frecuencia en estas fechas, sobre todo con las uvas que se utilizan para celebrar el fin de año en Nochevieja y durante las reuniones en torno a la comida.
Por ello, los pediatras del Hospital Gregorio Marañón de Madrid recuerden que es importante no perder de vista a los más pequeños, y ofrecen algunos consejos importantes sobre cómo prevenir estos incidentes y cómo actuar en el caso de que se produzca un atragantamiento infantil.
Según señalan desde el Servicio de Urgencias Pediátricas, es importante la prevención desde la preparación de las uvas, cortándolas en cuatro porciones o gajos. También puede seguirse el mismo procedimiento con aquellos alimentos similares en tamaño que sean redondos u ovalados, evitando mantener estas formas que pueden quedarse en la garganta de los niños.
Además, los especialistas del Marañón recuerdan que se debe tener Precaución con los frutos secos.los caramelos y los chicles, así como con las aceitunas y otros embutidos cortados en rodajas. Del mismo modo, se hace necesario prestar atención a otros elementos:
- Las bolsas de plástico pueden ser peligrosas; hay que tenerlas fuera del alcance de los niños y es conveniente anudarlas al guardarlas.
- Los juguetes deben ser lo suficientemente grandes para evitar que los introduzcan en la boca.
- Mantenga fuera de su alcance objetos pequeños, como botones, monedas y pilas de botón, que pueden producir, además, quemaduras o intoxicaciones.
Como destacar los pediatras del hospital público madrileño, un atragantamiento infantil ocurre de forma inesperada, por lo que es importante conocer las maniobras que hay que realizar para intentar resolver el problema mientras pedimos ayuda o llegan los servicios de emergencias.
«Si el niño tose de forma enérgica, hay que acompañarle, dejarle incorporado y animarle a seguir tosiendo. Si la tos deja de ser efectiva, el niño empieza a toser menos y hay cambio de coloración, lo más importante es llamar al 112 para pedir ayuda y pasar a realizar las maniobras de desobstrucción», indica María Escobarpediatra del Servicio de Urgencias Pediátricas.
Cuando se produce un atragantamiento en niños menores de 1 año
- Hay que comprobar si hay algún objeto en la boca visible y fácil de extraer. Si lo vemos claramente, introduciremos el dedo por el lateral de la boca y lo sacaremos con el dedo en forma de gancho, nunca meteremos la mano, porque puede empeorar la situación.
- Si el problema no se resuelve, colocaremos al niño sobre nuestro antebrazo, ligeramente hacia abajo, y le daremos 5 golpes secos en la parte alta de la espalda (entre los omóplatos) con el talón de la mano.
- Después le daremos la vuelta y le rodearemos el tórax con ambas manos, situando los dos pulgares sobre el esternón, tal y como se hace en compresiones torácicas, pero aplicando una presión más firme en esta zona.
- Repetiremos estas maniobras 5 y 5 hasta que el niño expulse el cuerpo extraño y respire bien. Si empeora o pierde el conocimiento, comenzaremos las maniobras de reanimación cardiopulmonar.
Cuando se produce un atragantamiento en niños mayores de 1 año
- También es preciso comprobar si tiene algún objeto en la boca. Si lo vemos claramente, lo extraeremos con el dedo en forma de gancho.
- Si no es posible, le daremos los 5 golpes secos en la espalda (entre las escápulas), apoyando al niño sobre nuestras piernas o en bipedestación.
- Después de realizaremos la denominada “maniobra de Heimlich”; colocando nuestros brazos debajo de las axilas del niño, pondremos la mano dominante con nuestro puño cerrado con el dedo pulgar dentro y la otra mano cerrada sobre el puño en la boca del estómago. A continuación, realizaremos un movimiento hacia arriba y hacia nosotros, apoyando la espalda del niño sobre nuestro pecho. Así, 5 veces.
- Veremos si ha salido el cuerpo extraño; de lo contrario, repetiremos estas maniobras 5 y 5 hasta que el niño respire bien, expulse el objeto o empore y pierda el conocimiento, en cuyo caso comenzaremos las maniobras de reanimación cardiopulmonar.




