El presidente Donald Trump se dirige durante la Cumbre de Estados Unidos de la ASEAN en Kuala Lumpur, Malasia, el domingo 26 de octubre de 2025.
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KUALA LUMPUR, Malasia — Se está acercando un acuerdo comercial entre Estados Unidos y China, dijeron el domingo funcionarios de las dos economías más grandes del mundo mientras alcanzaban un consenso inicial que el presidente Donald Trump y el líder chino Xi Jinping tratarían de finalizar durante su reunión de alto riesgo.
Cualquier acuerdo sería un alivio para los mercados internacionales incluso si no aborda cuestiones subyacentes que involucran desequilibrios de fabricación y acceso a chips de computadora de última generación.
Beijing limitó recientemente las exportaciones de elementos de tierras raras que se necesitan para tecnologías avanzadas, y Trump respondió amenazando con aranceles adicionales a los productos chinos. La perspectiva de un conflicto cada vez mayor corría el riesgo de debilitar el crecimiento económico en todo el mundo.
El principal negociador comercial de China, Li Chenggang, dijo a los periodistas que las dos partes habían llegado a un «consenso preliminar», mientras que el secretario del Tesoro de Trump, Scott Bessent, dijo que había «un marco muy exitoso».
Trump también expresó confianza en que había un acuerdo cerca y dijo que los chinos «quieren llegar a un acuerdo y nosotros queremos llegar a un acuerdo». El presidente republicano se reunirá con Xi el jueves en Corea del Sur, la última parada de su viaje por Asia. Trump reiteró que planea visitar China en el futuro y sugirió que Xi podría venir a Washington o a Mar-a-Lago, el club privado de Trump en Florida.
Bessent dijo en el programa «Face the Nation» de la CBS que la amenaza de aranceles más altos a China estaba «efectivamente descartada». En entrevistas en varios programas de noticias estadounidenses, dijo que las conversaciones con China produjeron acuerdos iniciales para impedir que los químicos precursores del fentanilo ingresen a los EE.UU., y que Beijing haría compras «sustanciales» de soja y otros productos agrícolas mientras posponía los controles de exportación de tierras raras.
El avance hacia un posible acuerdo se produjo durante la cumbre anual de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático, en Kuala Lumpur, en la que Trump buscaba pulir su reputación como negociador internacional.
Sin embargo, su forma de lograr acuerdos ha significado graves perturbaciones en el país y en el extranjero. Sus impuestos a las importaciones han complicado las relaciones con sus socios comerciales, mientras que el cierre del gobierno estadounidense lo tiene enfrentándose con los demócratas.
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, reacciona durante una reunión entre el presidente Donald Trump y el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, al margen de la Cumbre de la ASEAN en Kuala Lumpur, Malasia, el domingo 26 de octubre de 2025.
Mark Schiefelbein/AP
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Trump asiste a ceremonia de alto el fuego entre Tailandia y Camboya
En la cumbre, Tailandia y Camboya firmaron un acuerdo ampliado de alto el fuego durante una ceremonia a la que asistió Trump. Sus amenazas de presión económica empujaron a las dos naciones a detener las escaramuzas a lo largo de su disputada frontera a principios de este año.
Tailandia liberará a los prisioneros camboyanos y Camboya comenzará a retirar la artillería pesada como parte de la primera fase del acuerdo. Los observadores regionales monitorearán la situación para garantizar que los combates no se reanuden.
«Hicimos algo que mucha gente dijo que no se podía hacer», dijo Trump. El primer ministro camboyano, Hun Manet, lo calificó como un «día histórico», y el primer ministro tailandés, Anutin Charnvirakul, dijo que el acuerdo crea «las bases para una paz duradera».
El presidente firmó marcos económicos con Camboya, Tailandia y Malasia, algunos de ellos destinados a aumentar el comercio de minerales críticos. Estados Unidos quiere depender menos de China, que ha utilizado exportaciones limitadas de componentes clave en la fabricación de tecnología como moneda de cambio en las negociaciones comerciales.
«Es muy importante que cooperemos como socios dispuestos entre nosotros para garantizar que podamos tener cadenas de suministro fluidas y seguras, para la calidad de vida, para nuestra gente y la seguridad», dijo el representante comercial de Estados Unidos, Jamieson Greer.
El presidente Donald Trump, centro izquierda, posa con otros líderes durante la Cumbre de la ASEAN y Estados Unidos en Kuala Lumpur, Malasia, el domingo 26 de octubre de 2025.
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Trump vuelve a comprometerse con una región clave del mundo
Trump asistió a esta cumbre sólo una vez durante su primer mandato, y el secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, parecía no estar familiarizado con la ASEAN durante su audiencia de confirmación en enero.
El evento de este año fue una oportunidad para que Trump volviera a comprometerse con naciones que tienen una economía combinada de 3,8 billones de dólares y 680 millones de personas.
«Estados Unidos está con ustedes al 100% y tenemos la intención de ser un socio y amigo fuerte para muchas generaciones venideras», dijo Trump. Calificó a sus homólogos de «líderes espectaculares» y afirmó que «todo lo que tocas se convierte en oro».
A las amenazas arancelarias de Trump se les atribuyó el mérito de ayudar a impulsar las negociaciones entre Tailandia y Camboya. Algunos de los peores enfrentamientos modernos entre los dos países tuvieron lugar durante cinco días en julio, matando a decenas y desplazando a cientos de miles de personas.
En ese momento, el presidente amenazó con suspender los acuerdos comerciales a menos que cesaran los combates. Desde entonces ha persistido una tregua inestable.
El Primer Ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, elogió el acuerdo entre Tailandia y Camboya y dijo en la cumbre que «nos recuerda que la reconciliación no es una concesión, sino un acto de valentía».
Los aranceles son el foco del viaje de Trump
Trump se reunió en Kuala Lumpur con el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, quien también asistía a la cumbre. Ha habido fricciones entre ellos por el procesamiento en Brasil de Jair Bolsonaro, el expresidente del país y un aliado cercano de Trump. Bolsonaro fue condenado el mes pasado por intentar anular los resultados electorales en su país.
Durante su reunión, Trump dijo que podría reducir los aranceles a Brasil que promulgó en un esfuerzo por lograr indulgencia para Bolsonaro.
«Creo que deberíamos poder llegar a buenos acuerdos para ambos países», afirmó.
Si bien Trump simpatizaba con Lula, evitó al primer ministro canadiense, Mark Carney. El presidente está enojado con Canadá debido a un anuncio televisivo que protestaba por sus políticas comerciales y, de camino a la cumbre, anunció en las redes sociales que aumentaría los aranceles a Canadá por ese motivo.
Un líder ausente de la cumbre fue el primer ministro indio, Narendra Modi. Aunque fue cercano a Trump durante el primer mandato de Trump, la relación ha sido más tensa últimamente. Trump causó irritación al jactarse de haber resuelto un conflicto reciente entre India y Pakistán y de haber aumentado los aranceles a India por su compra de petróleo ruso.
