La estructura del 3-4-2-1 en posesión del USMNT está definida y se ha ido formando una identidad en los últimos partidos desde que debutó la formación en septiembre.
Las secuencias de pases son más repetibles, al igual que presionar gatillos y carriles. Los jugadores han cambiado partido a partido debido a lesiones y rotaciones, pero parece que Mauricio Pochettino ha encontrado una identidad preferida para seguir construyendo de cara al Mundial.
Hay asperezas que necesitan ser suavizadas. El gol encajado fue demasiado fácil y, por momentos, la posesión del último tercio se ralentiza. La repetición y, lo que es más importante, la disponibilidad de los mejores jugadores del grupo deberían ayudar a resolver esos problemas.
No es perfecto, pero es una buena base sobre la que seguir construyendo.




