El olímpico italiano Guido Vianello registró la victoria más importante de su carrera al derrotar a Arslanbek Mahkmudov por nocaut técnico en el octavo asalto la misma noche en que Christian Mbilli dominó a Sergiy Derevyanchenko.
Vianello y Mahkmudov se enfrentaron en la Serie Mundial de Boxeo hace casi 10 años, y Vianello se retiró en el cuarto asalto debido a una lesión en el oído. Esta vez, las cosas fueron diferentes.
Desde el primer asalto, Vianello conectó rápidamente una serie de derechas. Sin embargo, el recto de derecha fue decisivo, ya que hizo que el ojo izquierdo de Makhmudov se hinchara en el tercer asalto.
Makhmudov intentó cortar el ring a pesar de su visión reducida, pero le descontaron un punto en el sexto asalto por golpes detrás de la cabeza. Vianello conectó a voluntad desde afuera en el séptimo asalto. El guante de Makhmudov tocó la lona en un momento dado, aunque no se consideró que fuera derribado.
Al comienzo del octavo asalto, el médico consideró que Makhmudov ya no estaba en condiciones de continuar.
«Ahora soy un contendiente. Estoy listo para el nivel mundial y lo demostré esta noche», dijo Vianello.
«Pensé que había vencido a Efe Ajagba y llegué a esta pelea con mucha confianza. Estaba en la mejor forma de mi carrera y eso se demostró esta noche. Lo dominé y luego lo noqueé.
«Simplemente tuve que mantener la calma. Hubo un derribo que no fue sancionado, pero sabía que si me atenía a mi estrategia, conseguiría el nocaut».
Mientras tanto, Mbilli derrotó al tres veces retador al título mundial Derevyanchenko mediante una dominante decisión unánime de 10 asaltos.
Mbilli, quien está clasificado entre los tres primeros por las principales organizaciones sancionadoras, fue implacable desde el primer momento, lanzando bombas desde todos los ángulos.
Derevyanchenko intentó boxear desde afuera, pero se lastimó el bíceps izquierdo en el tercer asalto, lo que lo obligó a pelear con una sola mano. En el quinto, el ucraniano de 38 años contraatacó con derechazos consecutivos, pero la juventud y el poder de Mbilli lo abrumaron mientras luchaba por terminar la pelea de pie.
Mbilli mantuvo su récord invicto con puntuaciones de 100-90, 99-91 y 98-92.
Mbilli dijo: «Tuve algunos problemas con mi mano izquierda y no podía levantarla. Tuve que lanzar golpes. Fue difícil, pero tuve que hacerlo lo mejor que pude.
«Es un guerrero. Estaba en una posición difícil, pero se defendió. Voy a volver a casa y ver la pelea de nuevo».
«Ahora mismo estoy listo para peleas importantes. Quiero ser campeón del mundo. Sé que para ser el mejor tengo que vencer a los mejores. No quiero decir nombres, pero todo el mundo sabe quién es el número uno. Quiero pelear con el número uno».
Derevyanchenko dijo: «Mis piernas estaban bien. Sólo tenía un brazo. Necesitaba moverme. Cuando me quedaba quieto, él golpeaba en combinaciones.
«Es un buen boxeador, un boxeador fuerte. Pero si tuviera dos manos, creo que sería otra situación».
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