
Es importante reconocer que la compensación generalmente requiere que usted presente un reclamo, a menudo dentro de un plazo limitado, y depende de su capacidad para demostrar el impacto directo. Los proveedores no cubrirán daños consecuentes o indirectos, como pérdida de ventas, sanciones contractuales de sus propios clientes o daños a su marca. Estos son tus problemas, no los de ellos. Aunque esto es difícil de aceptar, entenderlo desde el principio es mejor que ser tomado por sorpresa.
Límites del recurso legal
¿Podrías ir más allá y emprender acciones legales? La respuesta rara vez es satisfactoria. El contrato estándar de nube, diseñado por un enjambre de abogados bien pagados, limita fuertemente la responsabilidad del proveedor. La mayoría de los términos de servicio excluyen explícitamente la responsabilidad por pérdidas indirectas y consecuentes y limitan los daños directos al monto que pagó el mes anterior. A menos que el proveedor haya actuado de mala fe o con negligencia grave (lo cual es muy difícil de probar), los tribunales tienden a confirmar estos contratos.
Ocasionalmente, si su interrupción tiene impactos más amplios, como una plataforma financiera ampliamente utilizada que genera un escrutinio regulatorio, pueden ocurrir casos de alto perfil. Pero para la mayoría de las empresas, el único recurso realista es a través del proceso de crédito SLA. Presentar una demanda no sólo genera costos legales sustanciales, sino que rara vez vale la pena en comparación con los daños menores que podría recuperar.




