Entre idas y vueltas, préstamos y caminos que se cruzan lejos de casa, siempre hay lugar para un reencuentro. Y esta vez fue en México. bruno valdez y Exequiel Zeballos Coincidieron en Cancún, en pleno descanso, y una historia en redes volvió a unirlos bajo los mismos colores. El central, quien debe volver al club, y el Chango, uno de los más queridos en Boca. Un cruce, relajado sí, pero que también vuelve a poner sobre la mesa el futuro del defensor.
El encuentro se dio en el Hard Rock de Cancún, donde Zeballos pasa unos días junto a su familia y Valdez disfruta de un país que conoce bien por su pasado en la América de México. El paraguayo fue el primero en subir señales: una historia entrenando en el gimnasio, con el pantalón amarillo de Boca y el número 25 que supo usar. Después llegó el rencuentro…
Valdez metió gimnasio con la 25 que estábamos en Boca.Una foto juntos, en modo relax, sonrisa de por medio y un mensaje corto que acompañó el momento. “Mi hermano, crack”escribió Valdez. Posteo que el Chango no tardó en responder: “Hermanaso” y un corazón.
El Chango y Valdez compartieron equipos con Diego Martínez como DT. Valdez y su vínculo con Boca
Más allá del reencuentro, la imagen volvió a poner el foco sobre la situación de Valdez. El defensor, quien se encontró un préstamo en Cerro Porteño, donde fue campeón y tuvo continuidad, pero a sabiendas de que es el último año de contrato en Boca (vence el 31/12), Valdez se despidió del club sin volver a Boca Predio y quedará libre en 2026.
Una buena noticia para ambas partes: porque el paraguayo irá a un club para tener minutos (en Boca no los iba a tener) y el Xeneize tendrá un cupo de extranjero que posiblemente, utilizará con Marino Hinestroza, con quien tiene negociaciones avanzadas.
El central, de buen nivel, fue campeón con Cerro Porteño. Ahora bien u ciclo en Boca fue corto y sin demasiada estabilidad: llegó en 2023, disputó 34 partidos y nunca logró afianzarse como titular. En Paraguay encontró rodaje y confianza, y hoy su futuro está lejos de Boca.
Mientras tanto, Valdez descansa, se entrena y se cruza con viejos compañeros. Y Zeballos, desde Cancún, vuelve a ser parte de una foto que conecta a Boca incluso en vacaciones.
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