Pablo Njie,
Thomas Naadi,Reporteros de la BBC África,y
Lucy Fleming
BTVEl gobierno de Benin dice que ha frustrado un intento de golpe de Estado por parte de miembros de las fuerzas armadas de la nación de África occidental.
«Las fuerzas armadas beninesas y sus dirigentes, fieles a su juramento, siguen comprometidos con la república», dijo el ministro del Interior, Alassane Seidou, en un discurso televisado.
Más temprano el domingo, un grupo de soldados hizo una transmisión en la que dijeron que habían derrocado al presidente Patrice Talon. Testigos presenciales dijeron a la BBC que habían oído disparos y que algunos periodistas que trabajaban para la emisora estatal habían sido tomados como rehenes.
Desde entonces, un asesor presidencial le dijo a la BBC que el presidente se encontraba en un lugar seguro.
Los diplomáticos franceses negaron informes anteriores de que se había refugiado en la embajada de Francia en Cotonou, la ciudad más grande de Benin y sede del gobierno del país.
Ha habido una serie de golpes de estado en África Occidental antes del frustrado intento del domingo en Benin, aumentando los temores de que la seguridad de la región pueda empeorar.
Benin, una antigua colonia francesa, ha sido considerada una de las democracias más estables de África. Pero Talon ha enfrentado acusaciones de reprimir las críticas a sus políticas.
La nación es uno de los mayores productores de algodón del continente, pero se encuentra entre los países más pobres del mundo.
Seidou afirmó en su discurso que «un pequeño grupo de soldados lanzó un motín destinado a desestabilizar el Estado y sus instituciones», añadiendo que los soldados leales habían podido «mantener el control de la situación y frustrar el intento».
Se han visto helicópteros sobrevolando Cotonú y las carreteras están bloqueadas con una fuerte presencia militar en varias calles.
Las embajadas de Francia y Rusia instaron a sus ciudadanos a permanecer en sus casas, mientras que la embajada de Estados Unidos recomendó mantenerse alejados de Cotonú, especialmente del área alrededor del complejo presidencial.
Los soldados rebeldes, liderados por el teniente coronel Pascal Tigri, justificaron sus acciones criticando la gestión del país por parte de Talon, quejándose en primer lugar de su gestión del «continuo deterioro de la situación de seguridad en el norte de Benin».
El ejército de Benin ha sufrido pérdidas cerca de su frontera norte con Níger y Burkina Faso, afectados por la insurgencia en los últimos años, a medida que militantes yihadistas vinculados al Estado Islámico y Al Qaeda se expandieron hacia el sur.
La declaración del soldado cita «la ignorancia y el olvido de la situación de nuestros hermanos de armas caídos en el frente y, sobre todo, la de sus familias, abandonadas a su triste suerte por la política del señor Patrice Talon».
Los rebeldes también atacaron los recortes en la atención sanitaria y los aumentos de impuestos, así como las restricciones a las actividades políticas.
Talon, de 67 años, considerado un aliado cercano de Occidente, dimitirá el próximo año tras completar su segundo mandato, con elecciones previstas para abril.
Empresario conocido como el «rey del algodón», llegó al poder por primera vez en 2016. Prometió no presentarse a un tercer mandato y respaldó al ministro de Finanzas, Romuald Wadagni, como su sucesor.
Talon ha sido elogiado por sus partidarios por supervisar el desarrollo económico, pero su gobierno también ha sido criticado por reprimir las voces disidentes.
En octubre, la comisión electoral de Benin prohibió la presentación del principal candidato de la oposición alegando que no tenía suficientes patrocinadores.
El mes pasado, los parlamentarios aprobaron enmiendas constitucionales, incluida la creación de una segunda cámara parlamentaria, el Senado.
Los mandatos de los funcionarios electos se ampliaron de cinco a siete años, pero el límite presidencial de dos mandatos se mantuvo.
AFPEl intento de golpe del domingo se produce poco más de una semana después de que el presidente de Guinea-Bissau, Umaro Sissoco Embaló, fuera derrocado, aunque algunas figuras regionales han cuestionado si esto fue organizado.
En los últimos años, África occidental también ha visto golpes de estado en Burkina Faso, Guinea, Malí y Níger, lo que ha generado preocupaciones sobre la estabilidad de la región.
Rusia ha fortalecido sus vínculos con estos países del Sahel en los últimos años, y Burkina Faso, Malí y Níger han abandonado el bloque regional de África Occidental, Ecowas, para formar su propio grupo, la Alianza de los Estados del Sahel.
La noticia del intento de toma de poder en Benin fue aclamada por varias cuentas de redes sociales prorrusas, según BBC Monitoring.
La Cedeao y la Unión Africana (UA) han condenado el intento de golpe.
El presidente de la Comisión de la UA, Mahmoud Ali Yousouf, reiteró la «postura de tolerancia cero de la organización panafricana hacia cualquier cambio de gobierno inconstitucional, independientemente del contexto o la justificación».
Nigeria, el gran vecino del este de Benin, ha descrito el intento de golpe como un «asalto directo a la democracia».
El Ministerio de Asuntos Exteriores nigeriano elogió la valentía de las fuerzas de seguridad de Benin al «defender el orden constitucional y garantizar la seguridad del presidente».
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