
«Spotify no se beneficia de ninguna manera del desafío que representa la transmisión artificial en toda la industria», dijo el portavoz de Spotify. «Invertimos mucho en los mejores sistemas de su clase y en constante mejora para combatirlo y salvaguardar los pagos de los artistas con fuertes protecciones como eliminar transmisiones falsas, retener regalías y cobrar multas».
Los fanáticos falsos parecen moverse cientos de millas entre jugadas
Spotify ha discutido públicamente intensificar los esfuerzos para detectar y penalizar el fraude en streaming. Pero RBX alegó que, en cambio, Spotify «deliberadamente» «despliega medidas insuficientes para abordar la transmisión fraudulenta», permitiendo que el fraude se vuelva «desenfrenado».
La plataforma parece menos capaz de manejar los llamados «proveedores de bots» que «normalmente diseñan bots para imitar el comportamiento humano y parecerse a redes sociales reales o cuentas de streaming para evitar ser detectados», alega la demanda.
Estos proveedores dependen de redes privadas virtuales (VPN) para ocultar las ubicaciones de las transmisiones, pero “con una diligencia razonable”, Spotify podría detectarlas mejor, afirmó RBX, especialmente cuando las transmisiones provienen “de áreas que carecen de población para soportar un gran volumen de transmisiones”.
Por ejemplo, RBX nuevamente apunta a las transmisiones de Drake. Durante un período de cuatro días en 2024, «al menos 250.000 transmisiones de la canción 'No Face' de Drake se originaron en Turquía, pero fueron geomapeadas falsamente mediante el uso coordinado de VPN en el Reino Unido», alega la demanda, basándose en «información y creencias».
Además, «un gran porcentaje de las cuentas que transmitían música de Drake estaban concentradas geográficamente en áreas cuyas poblaciones no podían soportar el volumen de transmisiones que emanaban de ellas. En algunos casos, cantidades masivas de transmisiones de música, más de cien millones de transmisiones, se originaban en áreas sin direcciones residenciales», alega la demanda.
Solo mirar cómo se mueven los fanáticos de Drake debería generar una señal de alerta, alegó RBX:
«Los datos de Geohash muestran que casi el 10 por ciento de las transmisiones de Drake provienen de usuarios cuyos datos de ubicación mostraron que viajaron un mínimo de 15.000 kilómetros en un mes, movieron ubicaciones irrazonables entre canciones (reproducciones consecutivas separadas por apenas segundos pero que abarcan miles de kilómetros), incluidos más de 500 kilómetros entre canciones (aproximadamente la distancia entre la ciudad de Nueva York y Pittsburgh)».
Spotify podría interrumpir gran parte de esta actividad, alegó RBX, al poner fin a su práctica de permitir que cuentas gratuitas con publicidad se registren sin tarjeta de crédito. Pero supuestamente no es así, porque «Spotify tiene un incentivo para hacer la vista gorda ante el flagrante fraude de streaming que ocurre en su servicio», dice la demanda.




