El nuevo informe de ARival Travel arroja una bola curva a la forma en que los estadounidenses planean sus viajes, especialmente con los millennials y la generación Z liderando el cargo. La perspectiva de viaje de 2025 EE. UU. Experiences revela que lo que realmente importa ahora no es la lista de verificación habitual de los lugares de interés, sino el ambiente de la experiencia en sí.
Una encuesta de 800 viajeros estadounidenses, combinado con respuestas de 2.400 personas adicionales en Europa y Estados Unidos, profundiza en Los hábitos, preferencias y expectativas genuinas de los jóvenes viajeros estadounidenses. No se trata solo de datos duros; Se trata de capturar la sensación vivida de los viajes y cómo la gente ahora ve sus aventuras.
Experiencias, la clave para elegir un destino
Cerca del 65% de las personas dicen que las experiencias disponibles influyen en su toma de decisiones, un cambio más notable entre los viajeros de 18 a 54 años. Están buscando una mezcla de sabores locales, salidas temáticas extravagantes y el tipo de autenticidad del vecindario en los que realmente puede hundir sus dientes. La vieja mentalidad de «Quiero ir aquí, ¿qué hay ahí?» Se transforma lentamente, «Quiero hacer esto, ¿dónde puedo pasar el mejor momento?»
Lo que los jóvenes viajeros estadounidenses están buscando
Hay crecientes zumbidos en torno a aventuras alimentarias, reuniones comunitarias, recorridos temáticos, escapadas de bienestar, festivales e incluso eventos deportivos. Curiosamente, las personas menores de 34 años tienden a bloquear sus planes muy adelante, mientras que los mayores de 55 años a menudo reservan el último minuto o incluso deciden una vez que llegan a su destino. Esta combinación de estilos de planificación muestra cómo se han vuelto los gustos de viajes eclécticos; Las preferencias repiten y cambian de maneras inesperadas.
Perspectiva para 2025
Mirando hacia el futuro hasta 2025, incluso como La demanda de experiencias de viaje únicas crece, los desafíos económicos como la inflación son difíciles de pasar por alto. En la mayoría de los casos, muchos jóvenes viajeros estadounidenses pueden cumplir con solo uno o dos viajes al año, mientras que algunos pueden no viajar en absoluto. Los expertos, con una nota de precaución, aconsejan a los operadores turísticos que intensifiquen su juego ofreciendo aventuras más personalizadas y basadas en intereses en este mercado cada vez más competitivo.




