Hay mucho en qué pensar antes de invertir en tecnología antigua. Hablé con Ed Baig de AARP (anteriormente Asociación Estadounidense de Personas Jubiladas) sobre lo que debería considerar.
¿Lo quieren?
Una primera pregunta crucial que debemos plantearnos es: ¿Qué tan receptiva es la persona mayor a tener esta tecnología en el hogar? Antes de pensar en comprar, debe conversar con su persona mayor y con todos los demás que viven en la casa, y asegurarse de que estén de acuerdo con la idea. Si bien muchas de estas tecnologías están destinadas a ayudar a las personas mayores y tal vez permitirles permanecer en sus hogares por más tiempo, ninguna de ellas reemplaza el contacto humano o los cuidadores humanos.
Instalación
La complejidad de la instalación varía de un dispositivo a otro. Muchas personas mayores conocen la tecnología y no tendrán problemas para configurar estos dispositivos, mientras que otras necesitarán ayuda. También es importante que comprendan cómo utilizar el dispositivo y cómo obtener asistencia técnica en caso de que surjan problemas. Es una buena idea tomarse el tiempo para ayudar con la instalación y leer la guía del usuario. Algunos servicios también ofrecen guías paso a paso o incluso sesiones de configuración en vivo con personal de soporte.
Costos
La mayoría de las tecnologías antiguas son muy caras e implican una tarifa inicial y una suscripción continua. Si cancela la suscripción, a menudo se le pedirá que devuelva el hardware (consulte siempre las condiciones). Si bien los costos mensuales tienden a ser muy altos, a menudo existen tarifas con descuento si paga por un período más largo por adelantado. También vale la pena estar atento a los eventos de ventas. Algunos dispositivos y servicios pueden estar disponibles sin costo para usted o estar subsidiados a través de planes o seguros de atención médica. La mayoría de los dispositivos requieren Wi-Fi en el hogar.
Privacidad
La privacidad es una preocupación seria con la tecnología antigua de diferentes maneras. Cualquier dispositivo del hogar con cámaras y micrófonos al que se pueda acceder de forma remota es una amenaza a la privacidad. Es importante que el usuario esté de acuerdo con esto y usted debe tener cuidado con la ubicación. Los dispositivos generalmente tienen una luz o algún indicador de que la cámara está encendida y algunos tienen un protector de privacidad.
Otra preocupación es qué datos recopila el proveedor de servicios o el fabricante y para qué podrían utilizarlos. Consulta las políticas de privacidad. Es probable que sea necesario algún procesamiento de datos que pueda incluir audio y video para que el dispositivo ofrezca su gama completa de funciones. También vale la pena considerar lo que potencialmente sucede con esos datos si la empresa cierra o es adquirida por otra empresa.
Otras consideraciones
Si bien la tecnología de la edad puede ayudar a mejorar la calidad de vida de las personas mayores y reducir la carga para los cuidadores, es importante evitar una dependencia excesiva. Una preocupación es que pueda desalentar las visitas y los controles en persona, en lugar de facilitarlos. Desde un punto de vista práctico, también quedará inservible si se desenchufa o se corta el suministro eléctrico o Wi-Fi.
Intente analizar los pros y los contras de cualquier dispositivo o servicio antes de comprarlo. Puede ser una gran inversión. Asegúrese de comprender cuáles son sus obligaciones y cómo puede cancelar el servicio o devolver un dispositivo. Muchos ofrecen un período de prueba breve, para que pueda probarlo in situ antes de decidir si funcionará para su familia.




