Jabari Parker ha sido, junto a Kevin Punteruno de los últimos ídolos de la afición del Palau Blugrana.
El ex nº2 del Draft de la NBA de 2014 aterrizó en el Barça en el verano de 2023 tras haber estado más de dos años sin jugar a baloncesto de forma profesional y una carrera en la mejor liga del mundo marcada por las continuas lesiones.
Con la camiseta azulgrana recuperó (parte de) su gran nivel y, por momentos, recordó a su mejor versión, la de sus primeros años en la NBA. Además, encajó como un guante en Barcelona y en varias ocasiones se manifestó como un enamorado de su vida en la Ciudad Condal. Todo encajaba y parecía ir como la seda.
Todo, menos los resultados deportivos. Las dos temporadas de Parker en el Barça estuvieron marcadas por los 'fracasos' deportivos -ningún título que llevó a las vitrinas y eliminaciones demasiado tempranas en Euroliga, Liga Endesa y Euroliga-, primero a las órdenes de Roger Grimau y, posteriormente, con Joan Peñarroya en el banquillo.
Por eso, a muchos les sorprendió la marcha del estadounidense este pasado verano. Versiones sobre los motivos de Parker para irse hubo muchas, pero una de ellas fue que no acabó de encajar con Peñarroya y quería jugar a las órdenes de un técnico más experimentado y de mayor prestigio. y por eso fichó por el Partizán de Belgrado de Zeljko Obradovic.
Pero la sorpresa saltó hace unos días, cuando el legendario entrenador serbio presentó su renuncia irrevocable. Tras superar el desconcierto inicial, el Partizán comenzó la búsqueda de un nuevo entrenador, que finalizó, para incredulidad de muchos -sobre todo, del propio Parker-, con el fichaje, precisamente, de un Joan Peññarroya que, a principios de noviembre, fue destituido como técnico del Barça tras una contundente derrota en pista del Bàsquet Girona (96-78).
A pesar de que el propio jugador se encargó de afirmar de que su 'reencuentro' con Peñarroya no le suponía ningún problema, lo cierto es que parece que sí que hay 'mar de fondo' entre el jugador de Chicago y el entrenador de Terrassa: en el debut del técnico egarense en el banquillo de los de Belgrado, saltado con una contundente derrota en casa por 87-112, Parker se quedó sin jugar ni un solo minuto. Sintomático.
Preguntado al respecto en la rueda de prensa posterior al encuentro, un cabizbajo Peñarroya quiso quitarle hierro al asunto.
«Jabari Parker es jugador del Partizan. Lo de hoy es una decisión técnica. Mi decisión técnica. Pero yo no tengo problemas personales con Jabari Parker. Es una decisión técnica y hoy he preferido a otros compañeros. Pero si él está en la plantilla (roster) él puede jugar».
Una explicación que, pareció no convencer a muchos de los allí presentes. Y que, seguramente, a Jabari Parker, tampoco. Veremos como evoluciona la situación deportiva del exazulgrana, que salió del Palau Blaugrana buscando un técnico diferente a Peñarroya… y que se lo ha acabado encontrando, de nuevo, en Belgrado.
