Por el Dr. Isaac Newton
News Americas, NUEVA YORK, NY, sáb. 26 de octubre de 2024: Las encuestas desempeñan un papel importante en la política, pero tienen límites. Los encuestadores intentan captar las opiniones de todo tipo de votantes (tanto nuevos como experimentados) seleccionando al azar a personas de diferentes orígenes y creencias políticas. Ajustan sus muestras para reflejar cómo podría ser la participación general. Si bien a veces puede parecer que favorecen a un partido, especialmente a la oposición, los encuestadores pretenden ser lo más equilibrados posible.

Aquí está la parte interesante: las encuestas son mejores para mostrar tendencias que para predecir resultados finales. Captan cómo se siente la gente en un momento particular, pero no pueden prometer exactamente cómo votarán todos. Las encuestas miden lo que parece probable según los datos disponibles, pero no pueden dar cuenta de cada cambio o influencia de último momento.
Hay muchos factores que pueden cambiar las cosas justo antes de las elecciones: noticias sorprendentes, campañas intensas, entusiasmo (o agotamiento) de los votantes e incluso el clima pueden afectar quién se presenta a votar y qué deciden. Por esta razón, las encuestas ofrecen una conjetura sólida, pero no una garantía.
Al final, las encuestas nos dan una buena idea de las opiniones actuales, pero no pueden predecir completamente el resultado final. Son mejores para decirnos lo que es posible, no lo que es seguro. Esto es lo que hace que las encuestas sean útiles, pero también la razón por la que deben tomarse con cautela.




