El técnico del Chelsea, Enzo Maresca, estaba frustrado. No por la destitución de Moisés Caicedo ante el Arsenal el domingo, sino por lo que percibido como una falta de coherencia.
Puedes ver su punto. El mes pasado, el centrocampista del Tottenham Rodrigo Bentancur fue amonestado por una falta sobre Reece James, lo que el árbitro asistente de vídeo (VAR) estuvo de acuerdo. Sin embargo, cuando Caicedo fue amonestado por una entrada similar a Mikel Merino, hubo una intervención que le sacó tarjeta roja.
«Es una tarjeta roja, pero ¿por qué Bentancur contra Reece (James) no fue una tarjeta roja cuando estábamos en casa de los Spurs?» -Preguntó Maresca.
«A nosotros, como entrenadores, nos cuesta entender por qué juzgan de otra manera.
«La de Moisés es tarjeta roja, sí. La de Bentancur es tarjeta roja, sí. ¿Por qué no le dan tarjeta roja? Es que nos cuesta entenderlo. La realidad es que es tarjeta roja. ¿Pero por qué lo juzgan de otra manera?»
Entonces, ¿cuál fue la diferencia?
Bueno, los resultados dependen en parte de quién sea el VAR, lo que dificulta mucho la coherencia.
Nunca hay dos faltas iguales y existen diferencias sutiles entre las dos. Bentancur solo intervino realmente, mientras Caicedo saltó un poco y su punto de contacto fue ligeramente más alto.
También hubo una pronunciada hebilla en el tobillo de Merino, que es algo que el VAR busca para indicar fuerza excesiva, y su bota se desplazó hacia atrás sobre el césped.
En el caso de Bentancur, el Panel de Incidentes Clave del Partido (KMI) de la Premier League apoyó la tarjeta amarilla para Bentancur por cuatro votos a uno, y respaldó por unanimidad que no se interviniera el VAR «sobre la base de que el desafío era bajo, ligeramente tardío e imprudente».
El panel de KMI respaldará la decisión de expulsar a Caicedo, pero no pasará mucho tiempo antes de que otra entrada de este tipo se considere solo una tarjeta amarilla.
Desde el inicio de la temporada 2023-24, el Panel KMI ha registrado 12 errores en revisiones de juego sucio graves.




