PUERTO PRÍNCIPE, Haití — Un grupo de presuntos pandilleros haitianos disparó esta semana contra las fuerzas estadounidenses que protegían la embajada de Estados Unidos en Puerto Príncipe, dijo el sábado un portavoz, en un incidente que puso de relieve la tensa situación de seguridad en la nación caribeña.
El capitán Steven J. Keenan, portavoz de los Marines estadounidenses, escribió en un correo electrónico que el tiroteo, que salió a la luz este fin de semana, ocurrió el jueves y agregó que los Marines respondieron al fuego. Ningún infante de marina resultó herido en el ataque.
La policía haitiana no estuvo disponible de inmediato para comentar sobre el intercambio de disparos.
Las pandillas controlan la gran mayoría de la capital de Haití, donde extorsionan a las empresas y luchan por el territorio con armamento pesado.
Estados Unidos sigue operando una embajada en Haití, pero en los últimos años el Departamento de Estado ha emitido numerosas advertencias pidiendo a los estadounidenses que no viajen allí debido al riesgo de secuestros, actividad terrorista y otros delitos y disturbios civiles.
Según las Naciones Unidas, la violencia de las pandillas ha desplazado a más de 1,3 millones de haitianos en los últimos años.
La seguridad en la nación de casi 12 millones de habitantes se ha deteriorado rápidamente desde 2021, cuando el presidente Jovenel Moise fue asesinado en su casa por mercenarios.
El asesinato de Moise ha generado un vacío de poder que los políticos del país han luchado por llenar y no se han celebrado elecciones para reemplazarlo.
A finales de septiembre, el Consejo de Seguridad de la ONU votó a favor de crear una fuerza de represión de pandillas de unos 5.500 soldados que se desplegarían en Haití para luchar contra los grupos criminales fuertemente armados.
Una fuerza más pequeña de agentes de policía de Kenia ha luchado por contener a las pandillas, que mataron a 5.600 personas el año pasado, según la Oficina de Derechos Humanos de la ONU.




