Putin desestimó esos comentarios del viernes por considerarlos agresivos y dijo que si Estados Unidos (la columna vertebral tradicional de la OTAN) no ve a Rusia como un «enemigo u objetivo» en su nueva controvertida estrategia de seguridad, Rutte no debería encaminar a la OTAN hacia una guerra con Rusia.
Putin, por su parte, lanzó una invasión a gran escala de Ucrania en 2022, anexó ilegalmente Crimea en 2014 y también atacó a la vecina Georgia en 2008. Pero eso no le impidió criticar a la alianza militar transatlántica por sus advertencias de conflicto, en medio de la postura de la administración Trump en su nuevo documento que detalla las prioridades de seguridad global.
«En la nueva estrategia, Rusia no es nombrada como enemigo ni como objetivo… y el secretario general de la OTAN se está preparando para ir a la guerra con nosotros. ¿Qué es esto? ¿Puedes siquiera leer? ¿Por qué estás apuntando a que la OTAN entre en guerra con Rusia si el país principal de la OTAN no nos ve como un enemigo?» Putin criticó.
El documento de Trump no llega a identificar a Rusia como una amenaza a la seguridad estadounidense. En cambio, apunta a los aliados tradicionales en Europa, advirtiendo que enfrentan un “borrado de civilización” en parte debido a la migración y retratándolos como obstáculos a los esfuerzos destinados a poner fin a la guerra en Ucrania.
El Kremlin elogió el documento, afirmando que se alinea con la propia visión de Rusia y señalando la aprobación de Moscú de la nueva dirección de Washington.




